De auténtica locura, una no sabe ni dónde vive, ni dónde tiene la cabeza; casi esquizofrénica, vaya. Sueño con el sonido del móvil por las noches y con personajes que no llegan a tiempo a las tartulias. ¡Qué bien que te vas a Fallas! ... ya..., sólo hay una cosa que me diferencia de la gran mayoría, que yo vengo a currar. Horario de 9 de la mañana hasta... que se tercie... del Hotel teléfono en mano a la Plaza de toros, de ahí corriendo para la tertulia, a la misma velocidad a los toros, y luego al periódico para cerrar edición a tiempo. Todo esto sin que se me caiga la ceja, de momento.

Y de lo visto hasta ahora mucho valencianismo y del bueno, la feria de julio se la están poniendo facilita, a la empresa, los toreros locales. Pero lo de que "la feria parla valencia", ya lo dije y no quiero repetirme, que no sería caso. Entretanto Talavante.

No le había visto aún. Me ha sorprendido gratamente su frescura; quizás le falte reposarse eso que dicen de coger poso; pero lo que está claro es que ha llegado a la afición valenciana y que si mata al sexto hubiera cortado cuatro orejas.

Un auténtico torbellino que desde el capote ha demostrado que venía al coso de la calle Xátiva a triunfar. Jugándosela en la muleta, tandas vibrantes. Actitud señores, actitud.

Por lo demás Morante no ha querido ni ver, ni oír hablar de Los Núñez; aunque dos chicuelinas y una media, valieron para muchos por toda la tarde.

Y Barrera, Vicente, valenciano. En el primer toro, del que sólo servía por un pitón; ha sabido verlo y le ha hecho una faena en su concepto del toreo con mucha calidad, que de no haber sido por los aceros le hubieran posibilitado acompañar a Talavante a hombros.

Mañana matinal de postín de corbata y flor en el hojal, ya saben de la "jet". Espero tener tiempo y hacer crónica. Ah... ojo a Serranito este año... Poco más porque no tengo mucho tiempo.